viernes, 4 de septiembre de 2009

SENTIMIENTOS

Hoy he estado hablando con unas personas mayores que viven en una residencia de ancianos, a veces en la vida es dificil describir los sentimientos que te pueden embargar de un momento a otro en un corto espacio de tiempo (y ahora solo hablo de horas),yhablar con ellos me ha hecho plantearme muchas cosas, en primer lugar siempre de jovenes pensamos que tenemos el mundo por delante, que somos invencibles y poderosos, ¡¡¡¡ay que falacia!!!!!!, cuan engreidos somos de jovenes, cuanto desconocemos de la vida en realidad y cuando empezamos a tener conciencia de ella y a cogerle el tranquillo se nos acaba y ya no hay nada que hacer.

Pues conversando con esas personas me he dado cuenta de no pocas cosas, una de ellas la señora isabel una mujer de 90 años me ha dicho hoy una gran verdad, ella con sus ojitos llorosos de recordar cada momento del dia a su esposo ya fallecido y al que cuidó sin ella poder, me dijo: mi niña tanto trabajar toda la vida para tener cosas para estar bien acomodaditos y ¿para que?, para terminar asi como estamos, mira que la vejez es fea, esto tendría que ser de otra manera ¿verdad?, esa reflexión me dejó pensativa por un momento y haciendome la misma pregunta.

Muchos de ellos se pasan el tiempo reflexionando sobre la vida que han llevado, lo que han hecho, lo que han sentido y ahora quizás se dan cuenta de lo que no hicieron y lo que dejarón pasar en su momento, pero el mal ya está hecho y ahora nada tiene solución para ellos porque lo hecho hecho esta.

Pues de regreso en el coche, mientras conducía me venian a la cabeza muchas formas de terminar nuestra vida en vez de hacerlo con la piel tan arrugadita como un trozo de papel estrujado, perdiendo la visión, perdiendo el oido, y perdiendo muchas veces hasta los recuerdos que hemos ido atesorando a lo largo de toda nuestra existencia, que muchos terminan con esas enfermedades tan crueles que les hace irreconocibles hasta la propia familia, que esos nietos que fueron su devoción años antes y por los que siempren guardaban chuches en sus bolsillos, que recogian en el cole y llevaban al parque hoy no sepan ni quienes son, es triste terminar asi ¿Por qué no puede ser de otra manera? Y me viene a la cabeza la pelicula “El curioso caso de Benjamin Button”, y ¿si fuera de esa manera? Aunque en la pelicula el a medida que rejuvenece también el iba olvidando cosas, bueno solo sería encontrar la formula mágica para llegar a la vejez ¿Qué piensan ustedes?